Las complicaciones de la diabetes se manifiestan cuando los altos niveles de azúcar en sangre comienzan a afectar distintos órganos o sistemas del cuerpo. El organismo utiliza la glucosa como combustible, pero cuando esta no se regula, el cuerpo comienza a resentirse.
Esto sucede a causa de la diabetes, un grupo de enfermedades que afectan los mecanismos de producción de insulina (la hormona encargada de regular la glucosa en sangre).
La diabetes puede ser de dos tipos:
- Tipo 1: Se trata de una enfermedad crónica en la que el sistema inmunológico ataca el páncreas y afecta su función de producción de insulina casi por completo. Suele manifestarse en la adolescencia y se trata a través de suplementos de insulina.
- Tipo 2: En este caso el cuerpo comienza a desarrollar resistencia a la insulina. Cuando esto pasa la exigencia del páncreas se vuelve mayor y por ende deja de funcionar de manera óptima.
Los niveles elevados de azúcar en sangre ocasionan daños a corto y largo plazo, en ese momento aparecen las complicaciones agudas y tardías de la diabetes.
Ahora de seguro te preguntarás ¿Cuáles son las complicaciones de la diabetes? ¿De qué otras enfermedades debo tener conocimiento? Pues hay varias cosas que debes tener en cuenta.
Complicaciones agudas de la diabetes
Las complicaciones agudas de la diabetes son aquellas que surgen a corto plazo, cuando los niveles de azúcar en sangre aumentan de manera brusca y no se atacan rápidamente. Suelen ser unas de las más graves, pero se les puede dar solución rápida si se atacan a tiempo. Algunas de ellas son:
Cetoacidosis diabética
Cuando no hay suficiente insulina para regular la glucosa en sangre el cuerpo emplea las grasas consumidas para intentar mantener la energía. Esto hace que aumenten los niveles de cetonas.
Esta es una de las complicaciones de la diabetes más graves y debe ser tratada inmediatamente. Si tus niveles de glicemia superan los 250 mg/dl y presentas síntomas como vómitos, aliento con olor a manzana, dificultad para respirar, sensación de sed o dolor de estómago acude a urgencias.
Estados hiperosmolares hiperglucémicos
Otra de las complicaciones de la diabetes es la deshidratación extrema por exceso de orina. Esto puede llevar a los pacientes a estados hiperosmolares hiperglucémicos,
Cuando hay deshidratación la sangre se concentra aún más, por lo que los niveles de glucosa aumentan en mayor proporción. Siempre que esto pase el cuerpo buscará eliminar los desechos a través de la orina.
Se podría decir que este estado hace caer al paciente en un círculo vicioso que termina por traer consecuencias graves como confusión, convulsiones y estado de inconsciencia que puede terminar en coma.
Hipoglucemia
Esta complicación suele ocurrir cuando el tratamiento para la diabetes provoca una bajada muy brusca en los niveles de azúcar en sangre. En este caso los pacientes suelen presentar síntomas como sudoración, ritmo cardíaco rápido, temblores, falta de coordinación, confusión, convulsiones y pérdida de conciencia.
Tanto la cetoacidosis diabética como los estados hiperosmolares hiperglucémicos son complicaciones relacionadas a la diabetes tipo 1. La hipoglucemia suele ocurrir como consecuencia del tratamiento para la diabetes tipo 2.
Complicaciones tardías de la diabetes
Las complicaciones tardías de la diabetes se dan por el daño que ocasiona en los órganos los altos niveles de azúcar en sangre.
A largo plazo esto puede afectar órganos vitales y causar afecciones crónicas graves entre las que destacan las complicaciones macro y microvasculares de la diabetes y otras patologías. Entre algunas de las más comunes se encuentran:
Enfermedades cardiovasculares
Si haces una búsqueda sobre cuáles son los órganos que afecta la diabetes uno de los primeros de la lista serán el corazón y los vasos sanguíneos. Las personas con altos niveles de azúcar en sangre son propensos a sufrir tensión arterial alta, infartos del miocardio y derrames cerebrales.
Lesiones nerviosas
Con el tiempo, la diabetes puede llegar a dañar los nervios de las extremidades, lo cual provoca síntomas como entumecimiento, ardor, hormigueo o incluso pérdida eventual de la sensibilidad. Es decir, incapacidad para sentir dolor.
El daño nervioso también puede afectar órganos como el corazón o el estómago y causar irregularidades en el ritmo cardíaco y problemas como diarreas y vómitos a repetición.
Enfermedades renales
La respuesta a la pregunta de cuál es el órgano más afectado por la diabetes podría ser el riñón. Una de sus consecuencias a largo plazo es la enfermedad renal crónica, que en casos graves puede requerir tratamiento con diálisis o incluso trasplante de riñón.
Daño hepático
Una de las complicaciones de la diabetes más comunes es el hígado graso. Estos depósitos anormales de grasa pueden ocasionar enfermedades como la cirrosis. La buena noticia es que se puede tratar a tiempo con buena alimentación y control de la glucosa.
Enfermedades oculares
Una de las complicaciones más graves de la diabetes es la retinopatía diabética. Esta enfermedad afecta los vasos sanguíneos de la retina, lo cual puede provocar pérdida completa de la visión.
Problemas infecciosos en la piel
Esta es una de las complicaciones de la diabetes a la que se le debe tener más cuidado. Tener altos niveles de glucosa en sangre afecta el funcionamiento de los glóbulos blancos (encargados de combatir las infecciones)
Como consecuencia, las personas diabéticas sufren de infecciones graves que tardan en sanar. Algunas de las más comunes son las úlceras en piernas o pies que aparecen como consecuencia de la mala circulación.
Estas heridas, producto también de los problemas de cicatrización, pueden infectarse hasta el punto de convertirse en gangrena o infección ósea. En casos graves es necesario amputar la extremidad.
Prevención de las complicaciones de la diabetes
Para prevenir las complicaciones de la diabetes es necesario acudir por lo menos una vez al año a revisión con el médico especialista. De esta manera se podrá detectar a tiempo cualquier tipo de anomalía y darle tratamiento antes de alcanzar el estado de gravedad.
Por lo general estas consultas se acompañan con distintas pruebas diagnósticas que indican el estado de la función renal, niveles de colesterol y un examen físico para comprobar la sensibilidad, exploración ocular y electrocardiograma.
Otra forma de evitar las complicaciones de la diabetes es llevar un control estricto de los niveles de glucosa en sangre y no descuidar factores importantes como el tratamiento farmacológico, una buena alimentación y un estilo de vida saludable.
Siempre que se tenga el tratamiento y los cuidados adecuados las complicaciones de la diabetes pueden mantenerse alejadas, sin embargo es importante conocer cuáles son sus síntomas para asegurar la detección temprana y evitar las consecuencias más graves.